La dificultad para controlar las emociones y la impulsividad en las decisiones pueden estar relacionados con:
1. Condición bipolar.
2. Condición de ansiedad.
3. Depresión.
4. Condición de estrés postraumático.
1. Condición límite de la personalidad.
2. Condición antisocial.
3. Condición narcisista.
1. Condición por déficit de atención e
hiperactividad (CDAH).
2. Lesiones cerebrales.
3. Enfermedad de Alzheimer.
1. Trauma emocional.
2. Abuso de sustancias.
3. Estrés crónico.
Estrategias para mejorar el control
emocional:
2. Técnicas de respiración.
3. Ejercicio físico regular.
4. Terapia cognitivo-conductual.
5. Aprendizaje de habilidades sociales.
1. Pausa y reflexiona.
2. Establece objetivos claros.
3. Busca consejo de otros.
4. Practica la autoreflexión.
5. Aprende a decir "no".
1. Diarios emocionales.
2. Aplicaciones de seguimiento emocional.
3. Grupos de apoyo.
4. Terapia de aceptación y compromiso.
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